"Hago un llamado de urgencia a todas las embarazadas a que por favor se vacunen y no crean en teorías conspiratorias que únicamente las están llevando a la muerte", instó Karla Pavón, jefa de la Unidad de Vigilancia de la Secretaría de Salud (Sesal), citada por el diario local El País.
Pavón desmintió los rumores sobre el presunto efecto de las vacunas en las embarazadas o en el feto, principal causa de que solamente 18.000 de las 150.000 gestantes registradas en Honduras han acudido a recibir sus dosis de Pfizer, el producto reservado para este grupo vulnerable.
"La vacuna no la va a matar, ni le provocará nada malo al bebé, una mujer embarazada tiene más riesgo de morir del COVID-19 por su estado, por lo que pedimos que se vacunen para salvaguardar sus vidas", recalcó la funcionaria.
Honduras inició el pasado 9 de agosto la campaña para vacunar a las embarazadas, con la meta de inmunizar a unas 150.000 gestantes en el país.