En una explosiva entrevista concedida a la BBC, Dominic Cummings, quien renunció a finales del año pasado, contó que se vio obligado a convencer a su jefe de que no visitara a la reina al comienzo de la pandemia de coronavirus en el país el marzo de 2020.
Según Cummings, en aquella ocasión, Johnson dijo: "Voy a ver a la reina... eso es lo que hago todos los miércoles. Al diablo con esto. Voy a ir a verla".
El asesor del primer ministro tuvo que advertirle a su jefe que la monarca, que tenía 93 años en ese momento, podría morir si contrajera COVID-19.
"No puedes ir a ver a la reina. ¿Qué pasa si vas a verla y le contagias el coronavirus a la reina? Obviamente no puedes ir. Solo dije, 'si le contagias el coronavirus y ella muere, ¿qué vas a hacer? No puedes hacer eso. No puedes arriesgarte. Eso es una locura'", compartió Cummings.
De acuerdo con el exasesor, tras la conversación, Johnson pareció finalmente entender la gravedad de la situación.
Desde Downing Street, un portavoz negó rotundamente las afirmaciones de Cummings, informa CNN.
En la entrevista a la BBC, Cummings también acusó al primer ministro británico de "anteponer sus propios intereses políticos a la vida de las personas" a través de su manejo de la pandemia.
Según el exasesor, Johnson estaba dispuesto a permitir que el COVID-19 "se esparciera por el país" para evitar que la economía se rompiera, pues creía que las personas que se morirían tenían "esencialmente más de 80 años" y, por lo tanto, eran menos activas económicamente.
Además, Cummings compartió que Johnson supuestamente rechazó el consejo de sus asesores científicos y médicos más importantes y decidió no imponer restricciones más estrictas para combatir el coronavirus. El primer ministro había utilizado el llamado de los medios de comunicación de derecha por menos restricciones para justificar sus acciones.