"Las autoridades cubanas están comprometidas en la solución inmediata de la situación que hay con los turistas rusos en Varadero. Estamos ante un problema técnico que no deberá repetirse", dijo.
Advirtió que en Cuba la lucha contra la tercera ola del COVID-19 ha representado "una situación muy tensa, debido a la presencia de una cepa muy agresiva y contagiosa".
"Esto ha traído como consecuencia que algunos laboratorios están al tope de sus capacidades, sobre todo el de la provincia de Matanzas. En Cuba hay más de 30 laboratorios, de los cuales, más de la mitad se crearon en los últimos 12 meses", indicó Escalona al recordar que "en medio de la epidemia, Cuba también está enfrentando el paso de eventos meteorológicos y sus consecuencias".
Por otra parte, indicó, en el país continúa la vacunación masiva con sus propias vacunas y ya casi 2 millones de cubanos están vacunados con las tres dosis, lo que representa el 20% de su población.
"Esto último aunque es algo positivo, agrega una tensión adicional al sistema de salud cubano", afirmó el consejero.
El 5 de julio la cónsul general de Rusia en La Habana, Nana Mgeladze, reveló a Sputnik que más de 150 turistas rusos que llegaron a Cuba a fines del pasado mes y en las primeras fechas de julio se encontraban recluidos en sus hoteles tras dar positivo al COVID-19.
Al día siguiente la diplomática comunicó que unos nuevos test realizados a los turistas rusos en Cuba permitieron suspender la cuarentena para 228 viajeros que estuvieron confinados en la isla.
A su vez, el embajador de Rusia en Cuba, Andréi Guskov, aseguró que autoridades de Moscú y La Habana trabajan en la coordinación de los protocolos higiénico-sanitarios que se aplican a los turistas rusos que arriban a la isla como parte del enfrentamiento a la pandemia del COVID-19 y se buscan soluciones a eventuales complicaciones técnicas.