"Todas las fuerzas extranjeras y mercenarios deben ser retirados de Libia sin demora, y el sector de seguridad debe ser reformado y colocado firmemente bajo una autoridad y supervisión civil unificadas", dice el comunicado al agregar que "Turquía presentó una reserva".
Además, los participantes de la conferencia se comprometieron a cumplir con el embargo de armas de acuerdo con la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU.
Los participantes también constataron una mejora significativa en la situación en el país norteafricano en comparación con el año 2020.
"La situación en Libia ha mejorado significativamente desde la Conferencia de Berlín sobre Libia celebrada el 19 de enero de 2020", dice la nota.
Precisa que en particular "las hostilidades se han detenido, se ha establecido un alto el fuego y se ha levantado el embargo de petróleo".
La segunda conferencia internacional sobre Libia en el marco del llamado proceso de Berlín se celebró este 23 de junio.
En febrero el Foro de Diálogo Político Libio, celebrado en Ginebra bajo los auspicios de la ONU, eligió un Gobierno de Unidad Nacional. El nuevo ejecutivo, que juró el 15 de marzo, trabajará hasta las próximas elecciones libias, programadas para el 24 de diciembre de 2021.
Se espera que el Gobierno de Unidad Nacional ponga fin a la dualidad de poderes en Libia, donde desde hace diez años se enfrentan el Gobierno interino junto con el Parlamento en Tobruk, que controla la parte oriental y cuenta con el apoyo del Ejército Nacional Libio comandado por el mariscal Jalifa Haftar, y el Gobierno de Acuerdo Nacional, avalado por la ONU, con sede en Trípoli, en el noroeste del país.