"Tras una investigación llevada a cabo por los inspectores de ética y disciplina de la UEFA en relación con el proyecto de la Superliga, se han abierto procedimientos disciplinarios contra el Real Madrid CF, el FC Barcelona y la Juventus FC por una posible violación del marco legal de la UEFA", ha confirmado la UEFA en un comunicado.
Si se confirma que los clubs sobrepasaron el marco legal podrían enfrentarse a multas millonarias.
La respuesta del Real Madrid, el Barça y la Juventus llegó a través de un comunicado conjunto en el que los clubs se muestran contundentes y aseguran que "no cederán a ningún tipo de coacción ni presión"
Consideran que la apertura de un expediente disciplinario por parte de UEFA es "del todo incomprensible, y atenta directamente contra el Estado de derecho que democráticamente hemos construido los ciudadanos de la Unión Europea", y afirman que constituye una falta de respeto a la autoridad de los propios tribunales de justicia.
Desde el primer momento la Superliga ha sido impulsada con el propósito de mejorar la situación del fútbol europeo, siempre en diálogo permanente con UEFA y con el objetivo de seguir aumentando el interés por este deporte y ofrecer a los aficionados el mejor espectáculo posible. Todo ello, en un marco de sostenibilidad y solidaridad, especialmente en la situación económica de máximo riesgo como la que atraviesan la mayoría de los clubs europeos, reza el comunicado.
Para los clubs, la UEFA, en lugar de estudiar la manera de modernizar el fútbol con un diálogo abierto, "pretende que retiremos las actuaciones judiciales que, como no puede ser de otra manera, cuestionan su monopolio del fútbol europeo".
El 18 de abril, doce clubes europeos Real Madrid, FC Barcelona, Atlético de Madrid, Juventus, AC Milán, Inter de Milán, Liverpool, Manchester United, Manchester City, Chelsea, Tottenham y Arsenal anunciaron la fundación de la Superliga europea, que estaría compuesta por un total de 20 equipos.
El anuncio provocó el absoluto rechazo de las federaciones y las ligas nacionales de España, Inglaterra e Italia, así como la UEFA y la FIFA, que amenazaron con represalias. Está reacción provocó que los clubs se fueran retirando uno tras otro del proyecto y 48 horas después, Real Madrid, Barça y Juventus se quedaron solos.
Estos tres clubs llevan semanas denunciado presiones, amenazas y ofensas. Una actitud que consideraron "inaceptable" en un comunicado conjunto anterior.