En un comunicado, la Anvisa dijo que será "la primera vez que el suero será testado en personas, lo que exigió una evaluación cuidadosa de los aspectos técnicos y de seguridad del producto".
Según el Instituto Butantan, ya hay 3.000 frascos listos para ser testados en humanos, y la previsión es que empiecen a ser aplicados en los voluntarios en las próximas dos semanas.
El material no sirve para prevenir la enfermedad, sino para tratar a pacientes ya contagiados y evitar que desarrollen un cuadro de gravedad.
El primer paso para la obtención del suero fue aislar el nuevo coronavirus en materiales obtenidos de un paciente brasileño infectado.
Después, ese virus fue cultivado en un laboratorio, inactivado por radiación y testeado en ratones, para verificar que no presentaría riesgos.
El virus inactivo fue aplicado en caballos, que desarrollaron anticuerpos; después, el plasma resultante (la porción de la sangre que contiene los factores de coagulación, anticuerpos y otras proteínas) fue recolectado y procesado por el Instituto Butantan, que a partir de ahí creó el suero.
El material se usará en voluntarios del Hospital del Riñón y de la Hipertensión y del Hospital de las Clínicas (ambos en Sao Paulo, sureste), en pacientes con infección reciente y alto o altísimo riesgo de enfermedad grave provocada por el SARS-CoV-2.