Este fin de semana en Mineápolis se conmemoró un año del asesinato de Floyd.
El policía Derek Chauvin fue declarado culpable en abril de asesinato no intencional en segundo grado, asesinato en tercer grado y homicidio involuntario en segundo grado por inmovilizar a Floyd en el suelo presionando la rodilla contra el cuello del afroamericano durante un intento de arresto.
La sentencia está prevista para el 25 de junio.
La muerte de Floyd desencadenó protestas masivas en un gran número de ciudades importantes de EEUU, donde los manifestantes denunciaron la brutalidad policial y exigieron justicia para los afroamericanos que sufrieron a manos de la policía estadounidense.