"El presidente (de EEUU, Joe) Biden dijo que la comunidad de inteligencia todavía no ha hecho una evaluación completa (…) pero el FBI (Buró Federal de Investigaciones) ha concluido que el ataque se originó en Rusia, por lo que el país tiene la responsabilidad de actuar responsablemente", dijo la portavoz en rueda de prensa.
Los responsables de la red de oleoductos detuvieron todas sus operaciones y desconectaron algunos sistemas informáticos para contener la amenaza de un ciberataque.
Colonial opera el sistema de oleoductos de productos refinados más grande del país, transportando más de 100 millones de galones de combustible diariamente desde Houston, en Texas (sur) hasta el puerto de Nueva York (noreste).