"Hungría espera que sus aliados dejen claro a Ucrania que el cumplimiento de sus obligaciones, incluido el respeto por los derechos de las minorías, es un requisito previo para una cooperación más estrecha con la OTAN", destaca el documento.
El comunicado precisó que Hungría considera inaceptable que, bajo el pretexto de la supuesta presencia de Rusia en Ucrania, en ese país se violen los derechos de la minoría nacional húngara.
Szijjarto subrayó que los húngaros de Transcarpatia no pueden ser culpados por lo que está sucediendo en Ucrania.
Según el canciller húngaro, la OTAN debe ver el problema de la presión ejercida sobre las minorías nacionales no como un asunto bilateral entre Kiev y Budapest, pues el compromiso de respetar a las minorías es una parte integral de las normas internacionales y también aparece plasmado en varios documentos de la Alianza.
La tensión entre Hungría y Ucrania surgió por la ley ucraniana sobre la enseñanza del 28 de septiembre de 2017, que restringe sustancialmente para las minorías étnicas la posibilidad de estudiar en su lengua natal.
Esta ley es la razón por la que Hungría bloquea la celebración de la reunión de alto nivel de la comisión Ucrania-OTAN.