"La gran mayoría de las personas que se encuentran bajo la custodia del ICE (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas) están detenidas en centros de detención de inmigrantes que pertenecen o son administrados por corporaciones penitenciarias privadas, que tienen un historial bien documentado de duras condiciones y atención negligente", dice el texto.
En una orden ejecutiva de enero, Biden le ordenó al Departamento de Justicia que no renovara sus contratos con prisiones privadas.
Amnistía Internacional dijo que la orden no se aplica a las instalaciones para inmigrantes, que son utilizadas por el Departamento de Seguridad Nacional.
Y agregó que había documentado condiciones horribles en la detención de inmigrantes, incluida la falta de distanciamiento físico, hacinamiento, higiene inadecuada y atención médica negligente, lo que convierte a las instalaciones en polvorines para la propagación del nuevo coronavirus.
La organización internacional pidió la liberación inmediata de todos los inmigrantes irregluares, añade el comunicado.
EEUU informó haber encontrado a más de 100.000 personas indocumentadas a lo largo de la frontera con México en febrero, y los críticos advirtieron que la nación enfrenta una repetición de la crisis de 2018-19 que presentó oleadas de caravanas de migrantes de América Central.