Según el medio, que cita a unas fuentes anónimas, los planeados ataques informáticos de EEUU están destinados a ser "clandestinos" y "evidentes para el presidente ruso, Vladímir Putin, y sus servicios de inteligencia y militares, pero no para el resto del mundo".
Además de esos ciberataques, la Administración Biden prevé imponer nuevas sanciones económicas a Rusia, así como fortalecer las redes informáticas del Gobierno norteamericano.
En diciembre pasado se informó que numerosas entidades y empresas del Gobierno federal de Estados Unidos habían sido blanco de un ciberataque masivo después de que unos piratas informáticos corrompieron el software de SolarWinds, una empresa de monitoreo de redes que proporciona servicios a varias agencias gubernamentales y militares del país norteamericano.
En enero la Agencia de Seguridad Cibernética y de Infraestructura de Estados Unidos (CISA) señaló a Rusia como posible autor de ese ataque informático que tenía como objetivo, según Washington, los datos de inteligencia de EEUU.
El 19 de febrero pasado el asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, declaró que Washington está a semanas de dar los primeros pasos en respuesta al ataque de piratería informática a SolarWinds.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, afirmó que Moscú no tiene nada que ver con ese ataque informático. Por su parte, el Ministerio de Exteriores de Rusia subrayó que las acusaciones de Estados Unidos son infundadas.