La estatua del general Manuel Baquedano en la plaza del mismo nombre se convirtió en el epicentro de los disturbios cuando los manifestantes incendiaron los alrededores del monumento.
Durante la protesta, donde la policía y los manifestantes intercambiaron gases lacrimógenos, proyectiles y cañones de agua, al menos 63 personas fueron detenidas.
Entre las exigencias de los manifestantes están: la liberación de sus compañeros detenidos, las reformas económicas en el país y la renuncia del presidente Sebastián Piñera.