En el informe, Kuo sugirió que el nuevo dispositivo de Apple podría tener un notch —o el área de la pantalla que alberga la herramienta de reconocimiento facial Face ID— más pequeño, lo que aumentará el espacio de pantalla disponible para el usuario.
El analista agregó que es probable que la pantalla de los iPhone tenga una tasa de refresco de 120Hz, lo que garantizará "una experiencia más suave".
El iPhone 13 también podría tener una mayor batería en comparación con el smartphone de la generación anterior gracias a "un novedoso diseño interior". Asimismo, estará equipado con las cámaras y los módems 5G más avanzados.
En cuanto al tamaño del dispositivo, supuestamente no va a cambiar. Se trata del iPhone 13 Mini, de 5,4 pulgadas, dos modelos estándar, con pantallas de 6,1 pulgadas, y el iPhone 13 Max de 6,7 pulgadas. Al mismo tiempo, es posible que los smartphones de nueva generación sean un poco más pesados que sus predecesores, subrayó Kuo.
En sus análisis, Kuo se basa en los datos proporcionados por los proveedores de componentes electrónicos. Se espera que el iPhone de nueva generación se presente al público en otoño de 2021.