"Esta mañana (26) hemos sostenido una productiva conversación con Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, hablamos del TPS, la prevención de la migración irregular y el compromiso de trabajar juntos buscando salidas viables y posibles", escribió el canciller hondureño en su cuenta de Twitter.
Rosales agregó por el mismo medio que: "Estamos claros que aunque la Administración Biden le está dando un trato más humano al tema migratorio, no significa fronteras abiertas y debemos asegurarnos que no se crea en las mentiras de los traficantes de personas".
El TPS es un beneficio migratorio que EEUU concede a inmigrantes de un país, víctima de un conflicto armado, desastre natural u otras condiciones de carácter temporal.
Las caravanas de migrantes centroamericanos irregulares que tratan de cruzar la frontera de EEUU comenzaron en octubre de 2018, cuando la primera partió de la ciudad de San Pedro Sula (norte), capital industrial de Honduras.
El evento migratorio de ese tipo ocurrió a mediados de enero de 2020, momento en que de la propia urbe catracha salió un colectivo que diferentes medios calcularon entre 7.000 y 9.000 personas.
La resistencia policial interpuesta por las autoridades de Guatemala y México obligó a regresar a suelo catracho a casi la totalidad de los caravanistas.