"Esta demora en el inicio de negociaciones reales llevó a que los talibanes, aprovechando la falta de voluntad de Kabul para mantener un diálogo sustantivo, expandieron su zona de influencia y ahora controlan 3/4 del territorio de Afganistán", declaró a Sputnik el enviado especial del presidente ruso para Afganistán y también jefe del Segundo Departamento de Asia del Ministerio de Exteriores de Rusia, Zamir Kabúlov.
Afganistán vive una situación de inestabilidad debido a los ataques que lanzan el movimiento radical talibán (proscrito en Rusia) y, desde 2015, ISIS (autodenominado Estado Islámico, también prohibido en Rusia).
El Gobierno afgano y los talibanes negocian un acuerdo de paz desde el pasado 12 de septiembre, un proceso que no ha llevado al cese de las hostilidades.