"Los Estados miembros advierten que ISIS podría recuperar la capacidad de orquestar ataques en diferentes partes del mundo en el transcurso de 2021", dijo Voronkov, citando el duodécimo informe del secretario general de la ONU, António Guterres, sobre la amenaza planteada por ISIS a la paz y la seguridad internacionales.
"Esto podría conducir a una repentina serie de ataques en algunos países, cuando se alivien las restricciones de movimiento relacionadas con el COVID-19", dijo.
Voronkov también señaló que la pandemia podría agravar aún más la amenaza a largo plazo de ISIS, ya que la crisis socioeconómica y las consecuencias políticas contribuyen a ampliar el número de personas vulnerables a la radicalización.
ISIS en el sur de África
Por su parte, el embajador ruso ante la ONU, Vasili Nebenzia, dijo que el grupo terrorista ISIS representa una amenaza que podría extenderse a los países del sur de África.
"La amenaza de ISIS está ganando fuerza en el Sahara y el Sahel y en áreas de Mali, Burkina Faso y Níger; las entidades de ISIS en el Sahara mayor están tratando de crear el califato islámico", dijo Nebenzia.
En ese sentido, indicó que "dado que los combatientes están ganando terreno en África central, existe la amenaza de que se extiendan a los estados del sur" del continente.
Nebenzia citó la difícil situación actual en Mozambique, donde grupos armados afiliados a ISIS han amenazado los campos de gas del país para obtener una fuente de financiación.
Vladímir Voronkov se hizo eco de las preocupaciones del embajador ruso sobre la creciente amenaza que representa ISIS en África.
*autoproclamado Estado Islámico, proscrito en Rusia y otros países