Los sancionados fueron:
Estas seis personas fueron designadas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, en inglés), del Departamento del Tesoro.
La designación supone una serie de restricciones, que según el caso puede incluir el congelamiento de activos, multas, y la imposibilidad de que las personas que se encuentran en esa lista puedan realizar negocios con ciudadanos o entidades estadounidenses, entre otras prohibiciones.
Por su parte, el secretario de Estado, Mike Pompeo, condenó en un comunicado los arrestos, y llamó a las autoridades en China y Hong Kong a liberar a los detenidos, al tiempo que pidió que los involucrados en la represión, rindan cuentas.
El de 6 enero, la policía de Hong Kong realizó varios allanamientos en los que detuvo a unos 50 reconocidos activistas y políticos que se oponen a Pekín, incluyendo un ciudadano estadounidense.
Pekín manifestó su apoyo a la policía de Hong Kong y criticó a Washington por considerar que tiene diferentes criterios en cómo fueron percibidos los disturbios en ese territorio, y en el Capitolio, sede del congreso estadounidense.