El 22 de diciembre, Trump otorgó indultos completos a cuatro exempleados de Blackwater condenados como partícipes del asesinato de 14 civiles iraquíes, incluidos dos niños, en la plaza Nisour de Bagdad en 2007.
"No apoyo la decisión del presidente Trump de indultar a los excontratistas de Blackwater. Fueron condenados por delitos que resultaron en la muerte de civiles. Envía un mensaje terrible al extranjero y también aquí en EEUU", dijo Waxman en una respuesta por escrito a una consulta de Sputnik.
Los excongresistas dijeron que la única explicación de la acción de Trump es "política".
Waxman investigó el caso como presidente del Comité de Supervisión y Reforma del Gobierno de la Cámara de Representantes en 2007.
Las actividades de las empresas militares privadas siguen siendo motivo de gran preocupación, merecen un escrutinio gubernamental riguroso y deben ser limitadas, dijo Waxman.
"Están actuando fuera del control de nuestro gobierno, pero pueden tener un impacto en nuestra posición en el mundo. Merecen un gran escrutinio y el gobierno de Estados Unidos debe limitar sus actividades", agregó Waxman.
Los cuatro excontratistas fueron condenados hace seis años.
Nicholas Slatten estaba cumpliendo cadena perpetua por cargos de asesinato en primer grado, mientras que los demás recibieron sentencias de entre 12 y 15 años.
El incidente con los guardias de Blackwater provocó un debate internacional sobre el papel de las empresas de seguridad privada contratadas por el gobierno de Estados Unidos para trabajar en zonas de guerra.
Blackwater, fundada en 1997, fue luego vendida y rebautizada como Academi.