"Las alegaciones de que nuestros hackers, según creen ellos [EEUU], interfirieron en 2016 en la política interna de EEUU, muestran el objetivo claro de esas publicaciones. El objetivo es vengarse e intentar influir en la opinión pública de nuestro país a fin de injerir, por supuesto, de cierta manera en nuestra política interna, algo que es totalmente obvio para mí", manifestó.
Para el presidente ruso, "no es de extrañar que tengan lugar esas desinformaciones, siempre han tenido lugar, es una suerte de contienda informativa".
Putin se mostró convencido de que detrás de las desinformaciones, en particular las relativas a él y su familia, están el Departamento de Estado y los servicios secretos de Estados Unidos.
"Una fuente anónima persigue fines desconocidos para nosotros, y después se le ve el plumero a esa fuente anónima. Me refiero a que se trata de casi lo mismo que ocurrió en 2016, cuando ciberdelincuentes rusos vinculados supuestamente con la inteligencia militar rusa, vulneraron el correo electrónico de un miembro del Partido Demócrata de EEUU. Y aquí esa fuente anónima. Me parece que está claro quiénes decían que esos hackers eran delincuentes vinculados con la inteligencia militar rusa. Eran el Departamento de Estado y los servicios secretos de EEUU, que son en realidad los autores [de las desinformaciones], es decir que eso se hace bajo sus órdenes", explicó.
En lugar de buscar venganza, los autores intelectuales de las publicaciones antirrusas deberían apostar por mejorar las relaciones con otros países, dijo el líder ruso.
"Quiero pedirles algo a los que ordenan esas publicaciones —no a los que las confeccionan, que son gente de los servicios secretos que hace lo que se le manda—. Los que ordenan publicaciones de ese tipo no deberían guiarse por motivos de venganza ni basarse en su falsa superioridad sino construir relaciones con los demás socios en el escenario internacional sobre la base del respeto mutuo y las normas fundamentales del derecho internacional", puntualizó.