"Este equipo va a ayudar a que tengamos cien millones de dosis de vacunas contra COVID-19 en los primeros cien días" de la nueva administración, dijo el presidente electo a la prensa en la ciudad de Wilmington, Delaware (noreste).
El exvicepresidente afirmó que el brote en Estados Unidos podría empeorar antes de mejorar.
Biden manifestó que se necesitarán fondos adicionales del Congreso a principios del próximo año para financiar el resto de los esfuerzos de distribución de la vacuna y evitar que la respuesta de Estados Unidos se detenga.
Será necesario persuadir al público estadounidense para que se vacune porque muchos se han vuelto cínicos sobre su utilidad, dijo Biden.
También expresó que quiere que las escuelas estadounidenses estén abiertas al final de los primeros 100 días de su presidencia, dependiendo de si el Congreso aprueba un nuevo proyecto de ley de alivio del COVID-19.
Se espera que la administración estadounidense apruebe vacunas en los próximos días para administrar decenas de millones de dosis en diciembre y cientos de millones más en los meses siguientes.
El plan es vacunar a casi todos los ciudadanos estadounidenses para fines del segundo trimestre de 2021.