El problema en el sistema de frenado afecta a la bomba de vacío. El resultado es una reducción de la capacidad para detener los vehículos, cosa que eleva el riesgo de sufrir accidentes y que ahora se quiere corregir. A tal fin, el consorcio francés Groupe PSA ha empezado a actualizar el software de diagnóstico en el sistema de asistencia en frenada.
El sistema de alerta rápida de productos peligrosos no alimentarios de la Unión Europea (RAPEX) ha sido el organismo encargado de dar cuenta de la contingencia, detectada por el propio fabricante. La alerta atañe a un amplio espectro de vehículos fabricados por estas tres marcas francesas, que comparten algunos componentes mecánicos. En principio Citroën, Peugeot y DS habrán de ponerse en contacto con los propietarios de los automóviles afectados.
Los modelos que presentan problemas en su sistema de frenado son los Citroën Berlingo, C3, C3 Picasso, C4, C4 Cactus y C4 Picasso; los Peugeot 208, 309, 2008, 3008, 5008, Partner; y también los DS3 y DS4 de DS Automobiles, la división de gama alta de Citroën.