"Solo se observó una reacción local", añadió el funcionario.
Rospotrebnadzor es el servicio federal responsable de la supervisión de la protección de los derechos del consumidor y el bienestar humano en Rusia.
El Ministerio de Salud ya había emitido un permiso para realizar ensayos clínicos de la Sputnik V en personas mayores de 60 años. Rusia registró oficialmente el pasado 11 de agosto la vacuna anti-COVID desarrollada por el Centro Gamaleya en cooperación con el Fondo Ruso de Inversión Directa (RFPI, por sus siglas en ruso).
Asimismo, la directora del organismo de supervisión, Anna Popova, ha hablado sobre otra vacuna rusa contra el COVID-19 producida por el centro Vektor y conocida como EpiVacCorona. Según Popova, es la más adecuada para los ancianos y los que tienen enfermedades crónicas.
"Creemos que la vacuna creada por los científicos del centro Vector de Rospotrebnadzor se adaptará mejor a las personas mayores, a las personas con enfermedades crónicas. Es una vacuna sintética, no hay ninguna proteína natural viva en ella", destacó Popova.
Añadió que la vacuna no está causando ninguna reacción alérgica, lo que confirmó con su propio ejemplo. Popova explicó que tiene una alergia estacional, la polinosis, y que no tuvo ninguna reacción al medicamento, "ni por la sensación, ni por los resultados de las pruebas de laboratorio".