Vankov es el primer parabuzo certificado de Rusia, jefe del fondo Medio Ambiente Asequible y campeón de múltiples competiciones en Rusia y a nivel internacional en los distintos tipos de deporte.
Aquel día, había ido a un acantilado para filmar un vídeo sobre varios lugares de interés de Anapa, cuando salió al muelle y vio a mucha gente mirando hacia el agua. Al acercarse, vio a dos hombres tratando de arrastrar a un tercero que estaba boca abajo.
"Le dije a la gente del muelle: 'salten, sálvenlo. Hagan algo'. La gente me miraba y eso fue todo", contó el hombre en una entrevista con el periódico ruso Argumenti i Fakti.
"Pero ya me había bajado, al acercarme lo primero que hice fue agarrar al rescatado por detrás, luego buceé por debajo de él y contuve la respiración para que saliera a la superficie y respirase un poco, luego comencé a llevarlo hacia la costa", destacó.
Ahora, tras muchos años de intensa rehabilitación y entrenamientos, puede mover las dos piernas, estar de pie con apoyo, pero aún sigue teniendo dificultades para dar un paso. Y todo es gracias a que no pierde la esperanza de recuperarse. Además, continuó practicando deporte. Las imágenes por resonancia magnética muestran que su médula espinal ha dado signos de mejora: le empezaron a crecer nuevos nervios.
"Mi entrenamiento se divide en partes. Por la mañana, antes de empezar a trabajar practico natación y luego hago un poco de gimnasia. Más cerca de la noche, cuando tengo más tiempo, hago ejercicios físicos de fuerza, me entreno con un especialista, hago gimnasia, me hacen masajes, trabajo en la espalda, (…) en la bicicleta multifuncional, (…) y en la alfombra", explicó.