"Consideramos que este tipo de retórica es inadmisible, no hay ninguna prueba de presunta participación rusa, como dicen, huella rusa, en lo ocurrido y no la puede haber", dijo Zajárova al comentar las amenazas del secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, con imponer sanciones contra Rusia por un supuesto uso de armas químicas contra el opositor ruso.
La diplomática lamentó que la diplomacia estadounidense vuelva a elaborar su posición en base a "puras especulaciones".
Zajárova añadió que Alemania todavía no ha respondido a las solicitudes de la Fiscalía General rusa sobre el caso Navalni.
"Creemos que todo eso se hace también para sostener en el espacio mediático internacional la tesis de que nuestro país es supuestamente reacio a aclarar los motivos del drástico deterioro de la salud del ciudadano ruso", manifestó la diplomática, y expresó su rechazo ante tales declaraciones.
Coalición contra el Nord Stream 2
Además, Rusia condena los llamados del secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, de crear una coalición en contra del Nord Stream 2, ya que de esta manera Washington está tratando de apropiarse del mercado europeo del gas.
"Condenamos los llamados a crear una especie de coalición en contra del gasoducto, en el que empresas alemanas y de otros países ya han invertido miles de millones de dólares", dijo la diplomática en una rueda de prensa.
Para Zajárova, las declaraciones de Pompeo ponen en evidencia "los verdaderos propósitos de Washington, que se propone ocupar el mercado europeo de gas mediante medios ilegales de competencia".
Pompeo agregó que Washington también podría responder a la situación con el opositor ruso Alexéi Navalni.
El proyecto de gasoducto Nord Stream 2 es impulsado por una alianza de empresas de Rusia, Alemania, Austria, Francia y los Países Bajos.
Se oponen al nuevo gasoducto EEUU, que busca vender a Europa su gas natural licuado de sus yacimientos de esquisto, y algunos países europeos como Polonia, Letonia y Lituania. También está en contra del proyecto Ucrania, que teme perder sus ingresos por el tránsito del gas ruso.
A pesar de las propuestas de varios políticos alemanes de suspender el proyecto como respuesta de Alemania al caso de Navalni, la canciller federal, Angela Merkel, declaró a principios de septiembre que el asunto del Nord Stream 2 y el caso del opositor ruso deben estudiarse por separado.
Navalni fue trasladado a Berlín desde Rusia el pasado 22 de agosto, después de pasar dos días en un hospital de la ciudad de Omsk, donde fue ingresado tras perder el conocimiento durante un vuelo procedente de la ciudad de Tomsk.
El 2 de septiembre, Berlín informó que los análisis toxicológicos realizados por un laboratorio de las Fuerzas Armadas de Alemania muestran que Navalni fue envenenado con una sustancia del grupo Novichok, incluido en la lista de sustancias prohibidas de la Convención sobre Armas Químicas.
Desde Moscú califican de infundada la versión alemana sobre lo ocurrido con Navalni y dicen esperar respuestas oficiales a las solicitudes enviadas a Berlín. Las autoridades rusas comenzaron una investigación preliminar de lo sucedido, pero a la vez insisten que abrirán un caso penal solo cuando tengan pruebas de que fue un envenenamiento.
Hace una semana, la clínica alemana Charité informó que el opositor ruso fue desconectado de la ventilación mecánica y ya es capaz de levantarse de la cama, y luego el propio Navalni publicó su primera foto desde la salida de coma y confirmó que ya puede respirar por su cuenta.
Este 22 de septiembre Navalni fue dado de alta del hospital berlinés.