En el vídeo que una de ellas colgó en redes sociales se puede ver cómo las dos trabajadoras se burlan y maltratan a una residente desvalida en una residencia de mayores. La que graba el vídeo, una supuesta influencer, se ríe mientras muestra cómo su compañera intenta de forma vejatoria dar de comer a una residente de nombre Elisa.
Durante todo el episodio la influencer que graba el vídeo se ríe de la situación. Poco tiempo después de subir el vídeo, la que grabó las imágenes ganó más de 6.000 seguidores, pero también una ola de condena.
Ante la indignación y repulsa que despertó, la joven compartió un nuevo vídeo para pedir disculpas y anunciar el cierre de sus cuentas en redes sociales.
La Asociación El Defensor del Paciente pidió a la fiscal superior de Cataluña una investigación penal por el maltrato a la mujer.
"Cuando alguien se atreve a hacer semejante e indecente trato a quienes pudieran ser sus abuelas, solo merecen una condena penal", asegura la asociación en un comunicado, a la vez que han pedido los vídeos de las cámaras de seguridad de las residencias de ancianos públicas y privadas.
"Esto es lo que hemos podido conocer ¿qué será lo que no hemos visto?", sostienen.
La residencia de ancianos despidió a las dos trabajadoras y abrió contra ellas un expediente disciplinario.
El alcalde de Terrassa, Jordi Ballart, denunció que "las imágenes y el sonido de estos vídeos son suficientemente expresivos de la situación que se produjo y de su incompatibilidad no sólo con el servicio público, sino también con el respeto a los derechos humanos más básicos".