"El registrador de la voz continuó grabando durante 19 segundos tras la detonación del primer misil", afirmó Zanganeh.
El segundo misil golpeó la aeronave 25 segundos después, según el funcionario.
El 8 de enero, el Ejército iraní bombardeó dos bases usadas por militares estadounidenses en Irak en represalia por la muerte del general Qasem Soleimaní, comandante de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria de Irán, asesinado una semana antes por EEUU mediante un ataque de precisión en Bagdad.
Varias horas después del ataque a las bases, un Boeing 737-800 de Ukraine International Airlines que acababa de despegar con 176 personas a bordo con destino a Kiev se estrelló cerca del aeropuerto de Teherán.
El 11 de enero, el Estado Mayor iraní admitió que el avión ucraniano fue derribado por un error humano, después de que un operador de la defensa aérea lo identificara como supuesto blanco enemigo que se había acercado demasiado a una importante instalación militar. Más tarde se supo que el Boeing fue atacado con el sistema de misiles tierra-aire Tor-M1.