Según informó el cabildo insular, al menos una decena de barrios de esta localidad tuvieron que ser evacuados de forma preventiva ante la evolución del fuego iniciado en la tarde del 21 de agosto.
La mayoría de los desplazados se dirigieron a casas de familiares, aunque el servicio de emergencias habilitó también dos albergues para alojar a unas 50 personas.
Unos 250 efectivos terrestres y ocho medios aéreos trabajan de forma coordinada para la extinción del incendio forestal con tres frentes activos.
Las altas temperaturas dificultaron el control del fuego, en el que trabajaron toda la noche efectivos de los Bomberos, la Policía de las Islas Canarias, la Guardia Civil y la Unidad Militar de Emergencias.
"La situación es compleja a estas horas, pero vamos a confiar en el desarrollo de las próximas horas. Gracias a todos los efectivos y a la colaboración de todos los Ayuntamientos para evacuar a los vecinos", afirmó en declaraciones a los medios el presidente del cabildo de La Palma, Mariano Hernández Zapata.