Billy Rios y Jonathan Butts, que trabajan en QED Security Solutions, descubrieron que los MiniMed y MiniMed Paradigm ―dispositivos para la autoadministración de insulina de la firma Medtronic― presentan fallos en su seguridad y están expuestos a la manipulación remota.
De tal suerte, seguía siendo posible interceptar la señal y liberar una cantidad de la hormona distinta a la previamente establecida, poniendo en riesgo la vida de los usuarios de este tipo de dispositivos. Así que Rios y Butts tomaron una decisión drástica. "Simplemente hemos creado un mando universal para todas las bombas de insulina del mundo", declaró Rios al medio especializado Wired.
"No sé por qué Medtronic ha tenido que esperar a que apareciese una app que puede herir o matar para tomárselo en serio".
Bombas y bolos
Las personas que sufren diabetes suelen administrarse ellas mismas su dosis de insulina, pulsando los botones necesarios en las bombas, los llamados bolos. Pero hay algunas bombas que incluyen control remoto, similares al mando a distancia de un coche, ofreciendo así la posibilidad de que el personal sanitario no tenga que estar in situ para controlar el proceso.
Cómo funciona la app
Y esto es justamente lo que Rios y Butts han hecho: crear una aplicación que además rastrea las señales que emite una bomba de insulina en su entorno. Las detecta y pone en comunicación el dispensador de esta hormona y la app, que suplanta al mando a distancia de la bomba.
En ese momento, un potencial usuario de la aplicación podría programar una dosis diferente a la necesitada y de resultados letales. El paciente no podría impedirlo, pues aunque las bombas de insulina avisan con un pitido de la administración de la dosis, se hace de manera tan rápida, que apenas hay tiempo material para despojarse del aparato e impedir la administración de la dosis (el bolo).
Los hipotéticos ataques sólo pueden producirse dentro del rango de acción de los mandos a distancia, no desde varios kilómetros. Pero Rios y Butts afirman que con la ayuda de un amplificador de señal, tal radio se incrementaría en unos metros.
Más vale tarde que nunca
Medtronic y los órganos reguladores estadounidenses admiten que no hay forma de subsanar los fallos de seguridad de los modelos de bombas de insulina afectados, tampoco de desactivar por completo la función remota.