Esta decisión se tomó como consecuencia de la política de Ankara en Siria, Libia y el Mediterráneo, destacó Maas, y agregó que las acciones de Turquía son "inaceptables" para Alemania.
Debido a que Alemania era el país que mayor apoyo le brindaba a Ankara, y que Turquía es el mayor importador de armamento alemán, surge la pregunta: ¿le quedan aliados militares a Turquía?
A pesar de las declaraciones del ministro de Exteriores alemán y la escalada de tensiones de las últimas semanas en las relaciones entre Turquía y Europa, Baburoglu indicó que esta prohibición de la exportación de armas no es algo nuevo.
De hecho, esta iniciativa fue adoptada por los países de la Unión Europea, liderados por Francia y Alemania, cuando Turquía comenzó la operación Fuente de Paz en Siria.
"Esencialmente, esta declaración de Maas se remite a un proceso que comenzó en aquella época. En aquel entonces, era Siria la que estaba en la agenda del día, hoy los temas predominantes son cuestiones como la situación en el Mediterráneo del Este y Libia", destacó el experto.
A pesar de que las exportaciones de armas a Turquía tienen una gran importancia para Alemania, Baburoglu destaca que las tensiones entre los dos países podrían mantenerse. Un indicio adicional de ello son las declaraciones del canciller alemán en Atenas sobre los "pasos provocativos de Turquía" en el Mediterráneo del Este.
Alemania: el intermediador entre Turquía y Europa
El experto destacó que el país teutón siempre se ha colocado en una posición de intermediario entre los Estados europeos y Turquía.
"Hasta ahora Alemania, representada por [Angela] Merkel, mostraba una aproximación más suave y diplomática en comparación con los países de la OTAN y la UE, que adoptaron una posición antiturca, especialmente Francia y Grecia", explicó Baburoglu.
De acuerdo con el analista, esta postura de Alemania se debe a que esta no quiere entrar en una confrontación abierta con Turquía. Una de las razones es que Berlín no quiere que todos los refugiados que se encuentran actualmente en Turquía tomen rumbo a Europa. Por ello, el experto está seguro que las relaciones turco-alemanas no llegarán al nivel de tensión que se vio en el caso de Francia.
"En el Mediterráneo del Este están presentes Alemania, Italia, Grecia, Chipre del Sur, Francia y EEUU: todos estos países quieren poner fin a los trabajos petroleros llevados a cabo por Turquía. Ello, a su vez, supone un menosprecio por los intereses nacionales de Turquía", aseveró el experto militar.
Por lo cual, visto el actual balance de fuerzas, Baburoglu considera que el acuerdo entre Rusia y Turquía sobre Libia tiene una importancia especial. Según explica, la colaboración entre los dos países en el marco del proceso de Astaná para solucionar el conflicto en Siria debería servir de ejemplo para hacer lo mismo en Libia.
"El acuerdo logrado entre Rusia y Turquía es muy importante para ambas partes. Supongo, que con la ayuda de este acuerdo Turquía podrá equilibrar las tensiones políticas en sus relaciones con la UE", explicó.
La continuidad de la colaboración ruso-turca, de una manera similar a como ocurre en Siria, tiene una importancia estratégica para los intereses nacionales de los dos países en el Mediterráneo del Este, concluyó Baburoglu.