Portavoces de la guardia revolucionaria, citados por la agencia Tasnim, comunicaron que la etapa final del entrenamiento Payambar-e Azam 14 (El Gran Profeta 14) comenzó por la mañana en la provincia meridional de Hormozgán, así como en el sector occidental del estrecho de Ormuz y del golfo Pérsico.
El ejercicio incluirá operaciones conjuntas en tierra, mar y aire de unidades de misiles, buques, drones y radares de las fuerzas navales y aeroespaciales del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica.
Los militares implicados en el entrenamiento se capacitarán en operaciones ofensivas con misiles, drones y buques, colocación de minas, operaciones tácticas navales contra el enemigo hipotético, operaciones de combate con el uso de misiles y helicópteros y lanzamiento de misiles antibuque.
La agencia Reuters reportó el 27 de julio que Irán, según las imágenes captadas el 26 de julio por la empresa Maxar Technologies, habría acercado al estrecho de Ormuz una maqueta del portaviones de clase Nimitz.
Simulacro defensivo contra "portaviones" de EEUU
Irán llevó a cabo un simulacro en el que atacó una réplica de un "portaviones estadounidense", comunicó la agencia Tasnim.
El comandante del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, Hossein Salamí, comentó al portal Sepah News que Teherán busca proteger sus intereses vitales y que los ejercicios son exclusivamente de carácter defensivo.
Sin embargo, agregó, en caso de invasión por parte del enemigo se prevén acciones ofensivas, que también se practicaron en las maniobras.
Según Teherán, el intento del avión iraní de escapar de la colisión provocó lesiones tanto entre la tripulación como entre los pasajeros. Teherán calificó las acciones de la Fuerza Aérea de EEUU como peligrosas y prometió responder.
Washington a su vez comunicó que el avión F-15 de la Fuerza Aérea de EEUU escoltó al avión iraní a distancia de un kilómetro, teniendo en cuenta las normas internacionales. Al identificar la aeronave como un avión de pasajeros de Mahan Air, el caza estadounidense se alejó a una distancia segura.
Funcionarios iraníes han subrayado en repetidas ocasiones que el país no dudará en fortalecer sus capacidades militares, incluida la capacidad de misiles, con fines de defensa.