Los argentinos Lucas Ocampos, Franco Vázquez y Éver Banega, junto con el suizo Luuk De Jong, todos ellos integrantes del Sevilla FC, equipo de la primera división de fútbol española, han protagonizado un lamentable acto de irresponsabilidad en medio de la pandemia de COVID-19 que asola el país ibérico.
La polémica surgió luego de que la pareja de Banega subiera a la red social Instagram unas fotografías donde figuraban en alegre reunión en compañía de sus parejas y otras personas. El ambiente lúdico en torno a un almuerzo habría pasado desapercibido de no ser porque las reuniones de más 10 personas estaban prohibidas en Sevilla hasta las 0:00 del día 24, habida cuenta de que la ciudad y toda la provincia se hallaban todavía en la fase 1 de desescalada de las medidas de confinamiento con motivo de la pandemia de coronavirus.
"Quiero pedir disculpas y reconocer que nos hemos equivocado perjudicando la imagen del club. Por ello sólo nos queda pedir perdón al club, a los compañeros y el cuerpo técnico y a la sociedad en general. Les garantizamos que hemos aprendido y que no volverá a repetirse acciones como ésta", escribió Ocampos en su cuenta de Instagram.
Por otra parte, la anécdota se ha producido en un contexto en el que la Federación Española de Fútbol (RFEF), La Liga (órgano que regula la competición) y los distintos clubes que integran el principal evento futbolístico en España, se hallan en conversaciones para tratar de activar un protocolo de seguridad que habilite la vuelta a la competición, en principio fechada para el 20 de junio. La acción de los jugadores del Sevilla podría obrar un endurecimiento extra del futuro protocolo, al menos para con sus personas. De momento, su club les ha apartado del grueso del equipo y les ha ordenado que se entrenen aislados del resto.
En cualquier caso, Javier Tebas, presidente de La Liga, ha cargado con dureza contra los cuatro futbolistas. Tebas ha asegurado que el organismo tomará medidas disciplinarias contra los asistentes al festivo almuerzo y posterior velada:
"La Liga siempre toma medidas. Debemos ser un ejemplo para la sociedad y tener mucho cuidado. Estamos poniendo en peligro 180.000 puestos de trabajo. Y ahí estaban todos bebiendo y fumando shisha. Hay que ser muy responsables", manifestó a los medios.