El espacio también tiene sus injusticias y algunas fantásticas formaciones estelares no alcanzan la fama de otras únicamente por encontrarse en el hemisferio sur. Es el caso típico de la nebulosa de Carina —también conocida como nebulosa de la Quilla—, cuyo esplendor quedó comprobado en una serie de imágenes captadas por el fotógrafo brasileño Carlos Kiko Fairbairn.
A pesar de ser cuatro veces más brillante y más extensa que la nebulosa de Orión, la nebulosa de Carina no es tan famosa debido a que solo puede ser vista en el hemisferio sur. De hecho, fue descubierta en 1751 por el astrónomo francés Nicolas Louis de Lacaille al observarla desde el cabo de Buena Esperanza, el extremo más austral del continente africano.
La nebulosa está compuesta fundamentalmente de gas hidrógeno, lo que explica el resplandor rojo que puede verse. El resplandor azul, en tanto, es producido por partículas de oxígeno.
Además de la estrella Eta Carinae, la nebulosa de Carina tiene a otra nebulosa en su interior: se trata de la nebulosa Keyhole (cerradura en inglés), más pequeña y oscura y compuesta por moléculas frías y polvo.
"Tienes que estar en el sur, mirando hacia el sur, para ver un cielo así. Y solo si tienes suerte", destacó la NASA al publicar una de las fotografías tomadas por Kiko Fairbairn en la que la nebulosa de Carina se ve encadenada con la nebulosa de la Gallina Corredora, la Cruz del Sur y la nebulosa del Saco de Carbón.
Pero no es la única captura que el brasileño hizo de la nebulosa de Carina. En su cuenta de Instagram, Fairbairn muestra varias de sus mejores tomas del cielo y comparte con sus seguidores sorprendentes relatos del esfuerzo necesario para lograr la toma perfecta de un cuerpo celeste.
Para tomar una de sus mejores imágenes de la nebulosa de Carina, el fotógrafo brasileño debió pasar varias noches consecutivas en el desierto de Atacama, en Chile. "Ya habían pasado las 4 de la mañana y el cansancio golpeaba a mi puerta. Comencé a empacar porque todavía me quedaban dos horas de conducir. Justo antes de irme, miré atrás y vi esta maravillosa escena formándose: la mano casi 'tocando' la nebulosa de Eta Carinae y la constelación de la Cruz del Sur. ¡Qué vista!", rememora en la red social.
La Eta Carinae y su sistema despierta gran interés entre los astrónomos del hemisferio sur. En 2016, por ejemplo, el Observatorio Europeo Austral (ESO) logró obtener la imagen de Eta Carinae con mayor resolución jamás obtenida.
El resultado, quizás no tan atractivo para los no astrónomos, fue considerado un avance para comprender mejor el desarrollo de las estrellas muy masivas.