Esta nueva compañía nace de la fusión de O2, filial de Telefónica en tierras británicas, y Virgin Media, red perteneciente a Liberty Global. Un operador que aglutinará más de 46 millones de clientes móvil, banda ancha y vídeo y capaz de competir con British Telecom, líder hasta la fecha del sector en el país.
Con esta operación, Telefónica pretende reforzar su posición en el mercado británico. La fusión de ambas compañías permitirá no solo crear un proveedor integrado de servicios móviles y fijos, sino también impulsar la red de alta velocidad de Virgin Media y el despliegue de red 5G de O2. Además, esta nueva plataforma posibilitaría la exportación del modelo de servicios convergentes de Telefónica al Reino Unido, en el que se combina teléfono fijo, móvil, banda ancha y televisión.
Una aventura empresarial que dará lugar a "un campeón nacional" según ha explicado el presidente ejecutivo de Telefónica, José María Álvarez Pallete.
"Combinar O2, operador móvil número uno del mercado del Reino Unido, con la red de banda ancha de alta capacidad y los servicios de entretenimiento de Virgin Media supone un punto de inflexión en el mercado británico", ha afirmado Álvarez Pallete.
Se espera que la operación esté finalizada hacia mediados de 2021. A pesar de todo, está sujeta a las correspondientes aprobaciones regulatorias, a la ejecución de las recapitalizaciones, así como a otras condiciones de cierre habituales en este tipo de movimientos.
Resultados de Telefónica
La alianza se ha hecho pública el mismo día que Telefónica ha presentado sus resultados. La operadora española ha obtenido un beneficio neto en el primer trimestre del año de 406 millones de euros, un 56,2% menos que en el mismo periodo en 2019.
Respeto a la retribución a los inversores, la empresa, aunque ha abandonado sus objetivos financieros para este año, sí mantiene su dividendo previsto de 0,40 euros por acción. En junio se pagará el segundo tramo de 2019, es decir 0,20 euros por acción, mientras que en diciembre se abonará el primero de 2020.
En cuanto a la deuda financiera, esta se sitúa en 38.223 millones de euros en marzo, por lo que se reduce un 5,3% con respecto al mismo mes en 2019. Si se incluyen los arrendamientos, la deuda se calcularía en 44.754 millones, 369 millones menos que a finales de 2019.