Los tres falsos repartidores en el momento de su arresto portaban unas maletas en su vehículo idénticas a las utilizadas por las empresas de reparto. En ellas se guardaban los estupefacientes.
El joven detenido en Valencia llevaba cerca de 900 gramos de marihuana cuando fue interceptado por los agentes. Además, llevaba entre sus pertenencias 575 euros y mochila. El varón fue detenido como presunto responsable de un delito contra la salud pública.
Por su parte, los arrestados en Alicante habían sido previamente identificados por los agentes encargados de hacer cumplir las medidas decretadas en el estado de alarma. Ambos llevaban una suma inusual de dinero, en comparación a lo que solían llevar otros trabajadores de la misma actividad. Esta circunstancia hizo sospechar a los policías que podrían estar aprovechando el sistema de envío a domicilio para distribuir sustancias estupefacientes.
Los autores han sido acusados como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas. Esta actuación se encuadra dentro del dispositivo establecido para garantizar el cumplimiento de las medidas de distanciamiento social y para prevenir la delincuencia durante el período del estado de alarma.