La Comunidad de Madrid se encuentra en alerta máxima. Las autoridades intentan dotar a los hospitales de todos los servicios necesarios para tratar a los pacientes que acuden contagiados por coronavirus. Sin embargo, la escasez de trajes de protección para todo el personal de los servicios sanitarios —al igual que mascarillas y gel desinfectante, e incluso camas en los hospitales— hacen que eso se convierta en un problema que hay que solucionar con máxima urgencia.
La segunda localidad más afectada por la pandemia es Valdemoro, con 75.000 residentes. La ciudad cuenta con un solo hospital que da servicio a la mayoría de los vecinos de la zona sur de la comunidad y un centro penitenciario.
Una de las situaciones más polémicas se ha producido en el Hospital Gregorio Marañón, en el centro de la capital. Allí, los sanitarios se quedaron sin mascarillas FFP2 (las del nivel alto de protección) y tuvieron que utilizar las mascarillas de papel para seguir atendiendo a los pacientes, poniendo en riesgo su salud. Ante esta situación, muchos ciudadanos chinos con residencia en España están donando mascarillas y geles desinfectantes.
Sanitarios de baja médica
Este hecho hace reflexionar sobre la actual situación de los sanitarios, sobreexpuestos y con muy poca protección. Europa pide a los profesionales sanitarios que hayan estado en situación de alto riesgo de contagio que permanezcan en sus casas 14 días de baja. Ante "contacto sin protección", el Centro Europeo de Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) pide la "suspensión del trabajo durante 14 días desde la última exposición" a casos confirmados de COVID-19 y la monitorización activa de síntomas.
Así, los profesionales sanitarios deben permanecer aislados si han tenido "contacto físico directo con un caso de COVID-19 (por ejemplo, estrecharse la mano)", si han tenido "contacto directo sin protección con las secreciones infecciosas" como "al toser, tocar con la mano sin guante pañuelos de papel usados" o haber tenido "contacto cara a cara" con un caso de coronavirus "en un radio de dos metros" durante más de 15 minutos.
Hasta ahora, las personas aisladas por este motivo estaban en un régimen de incapacidad laboral por contingencias comunes. Con la aprobación del reciente decreto ley, la cuarentena y la baja por coronavirus pasan a considerarse accidente laboral, es decir, tienen una relación causal con el trabajo que los profesionales sanitarios, junto al resto de trabajadores de otros sectores, desempeñan. Esto supone que la cuantía a percibir es del 75% de la base reguladora desde el día siguiente al que se produce la baja laboral.
Despliegue fuerzas militares
Por su parte, según confirman diversas fuentes, la Comunidad de Madrid deberá afrontar un gasto millonario para paliar las consecuencias de la pandemia y no se descarta una financiación adicional del Gobierno para combatir el virus.
Asimismo, el Ministerio de Defensa ha puesto en marcha la Operación Balmis para iniciar los procedimientos de coordinación y atender a las peticiones gubernamentales con el objetivo de reducir esta amenaza. Más de 1.000 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) trabajan desde el 16 de marzo en 13 provincias españolas para realizar patrullas de reconocimiento y vigilancia de infraestructuras críticas donde pueda producirse aglomeración de personas, como en los hospitales.