Los países europeos tienen que "evaluar el perfil de riesgo de sus proveedores y, en consecuencia, aplicar las restricciones pertinentes a suministradores considerados de alto riesgo, incluidas las exclusiones necesarias para mitigar los riesgos con eficacia, en relación a recursos clave definidos como críticos y sensibles", indicó el Ejecutivo comunitario en sus recomendaciones.
La Comisión Europea también insta a potenciar las capacidades europeas en las redes 5G con programas y financiación de la UE.
El conjunto de instrumentos cubre todos los riesgos, incluido el de la injerencia de terceros países a través del 5G, aunque subraya que "no va dirigido contra ningún proveedor o país en particular".
La Comisión Europea espera que a finales de 2020 "los primeros servicios 5G estén disponibles en 138 ciudades europeas".
El periódico Financial Times publicó, citando a fuentes, que empresas chinas como Huawei y ZTE no tendrán acceso a componentes sensibles de la red relacionados con la seguridad de los países europeos.
EEUU acusa a Huawei de estar colaborando con la inteligencia militar china y de espiar a sus clientes.
Washington trata de convencer a los países europeos para que dejen de adquirir los equipos de Huawei para el desarrollo de las redes de telecomunicaciones 5G.
El gigante tecnológico chino rechaza esas acusaciones, que tacha de infundadas y políticamente motivadas, y critica que amenazan la libre competencia en los mercados.
Intensificando la presión a sus aliados, Estados Unidos amenaza con dejar de transmitir datos de inteligencia si cooperan con las empresas de China sobre las redes 5G.
No obstante, el 28 de enero el Gobierno británico aprobó una decisión sobre las redes 5G que prácticamente da luz verde a la presencia de Huawei pero limita el acceso de "vendedores de alto riesgo" a componentes sensibles.