Un portavoz de la Embajada de China en Copenhague afirmó que el dibujo satírico de Niels Bo Bojesen "es un insulto a China y vulnera los sentimientos del pueblo chino".
"Sin simpatía ni empatía alguna, cruza los límites de la sociedad civilizada, así como las fronteras éticas de la libertad de expresión, y es una afrenta para la conciencia humana", manifestó.
El diplomático expresó "fuerte indignación" y exigió que Jyllands-Posten y Niels Bo Bojesen reconozcan su error y presenten disculpas públicas al pueblo de China.
Niels Bo Bojesen escogió el amarillo para dibujar las puntas de la corona del 2019-nCoVy las colocó sobre un trasfondo rojo en posición idéntica a las cinco estrellas amarillas de cinco puntas que aparecen en la bandera de China.