"El inicio de la II Guerra Mundial fue provocado por las entonces potencias totalitarias, la de Alemania de (Adolf) Hitler y la de la Unión Soviética de [Iósif] Stalin", insisten los autores de la resolución.
Junto con el pacto de no agresión se firmó un protocolo secreto sobre la delimitación de las zonas de influencia en Europa del Este y Central.
La Cámara baja polaca también condenó "las declaraciones falsas y provocativas de los representantes de los máximos órganos de poder de la Federación de Rusia que buscan responsabilizar a Polonia del inicio de la II Guerra Mundial".
"Así la ideología vence a la verdad. Y la verdad está documentada por el tribunal de Núremberg. Si el Sejm polaco duda de sus decisiones, que lo declare directamente", comentó en su página en Facebook la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, acerca de la aprobación de la resolución.
El 24 de diciembre de 2019, el presidente ruso, Vladímir Putin, citando documentos de archivo, recordó que en 1938 Adolf Hitler planeaba deportar a todos los judíos a África, plan que aplaudió el entonces embajador polaco en Alemania, Józef Lipski, quien propuso ponerle un monumento por esa iniciativa.
La Cancillería polaca citó al embajador ruso, Serguéi Andréev, después de las declaraciones de Putin sobre la política de Polonia en los años 30 del siglo pasado.