El cohete desechable Atlas V subirá la nave diseñada por Boeing; después, el CST-100 Starliner pondrá en marcha sus motores para llegar a la Estación Espacial Internacional (EEI) por sí sola y transportar allí la carga de 270 kilogramos. Tras acoplarse al centro de investigación internacional, la nave permanecerá en órbita hasta el 28 de diciembre y luego aterrizará en el Campo de Misiles de Arenas Blanca, en Nuevo México (EEUU).
El cohete despegó a las 6.36 hora local (11.36 GMT).
Según la empresa diseñadora de la nave, Boeing Space, la inserción orbital fue anómala, pero el equipo del Boeing controla la situación y evalúa los próximos pasos.
Está previsto que Starliner se acople con la EEI el 21 de diciembre y vuelva a la Tierra el 28 de diciembre.
La primera misión será realizada sin tripulación, pero bajo el control de un maniquí llamado en honor a Rosie the Riveter, icono cultural datado de la época de la Segunda Guerra Mundial. Rosie fue la remachadora que representaba a las mujeres que trabajaban en las fábricas produciendo municiones para suministros bélicos. Se cree que, detrás de este personaje ficticio, pudiera haber estado Naomi Parker Fraley, empleada de una estación naval en California.
Actualmente, EEUU desarrolla sus naves espaciales Dragon 2 y Starliner para llevar a sus astronautas a la EEI.
El último vuelo de un astronauta estadounidense en una nave Soyuz está programado para el 20 de marzo de 2020.