Se informó con anterioridad que los empleados de Sputnik Estonia recibieron cartas del Departamento de Policía y la Guardia de Fronteras del país con amenazas directas de iniciar un proceso penal en su contra si no dejan de trabajar para el grupo mediático Rossiya Segodnya, matriz de Sputnik, antes del 1 de enero de 2020.
Expresó la preocupación por la situación actual, al subrayar que "los empleados de los medios deben tener derecho a desempeñar libremente sus funciones, sin amenazas provenientes de los órganos superiores", dice la declaración de la Federación Internacional de Periodistas.
Este jueves el secretario general de la Federación Europea de Periodistas (FEP), Ricardo Gutiérrez, también llamó a Estonia a abstenerse de imponer restricciones innecesarias sobre el trabajo de periodistas extranjeros.
Por su parte, el presidente ruso, Vladímir Putin, calificó el acoso a la agencia rusa Sputnik en Estonia de "una manifestación de cinismo".
La Cancillería rusa expresó su indignación por el acoso a la agencia y pidió reacción inmediata de las estructuras internacionales.
Por su parte, Rossiya Segodnya instó a la Organización de las Naciones Unidas, la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, el Consejo de Europa, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos a pronunciarse sobre los ataques a la libertad de expresión en Estonia y tomar medidas para garantizar el derecho de los periodistas a ejercer su labor.
Las autoridades estonias justifican la persecución a Sputnik Estonia con las sanciones impuestas por la UE el 17 de marzo de 2014 contra varias personas y entidades a la luz de los acontecimientos en Ucrania.
Rossiya Segodnya, por su parte, insiste en que no figura en ninguna lista de sanciones de la UE.