El 18 de noviembre, el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, anunció que su país levantará a partir del 15 de diciembre de 2019 la exención de sanciones para la instalación nuclear de Fordo, vigente hasta esta fecha.
La medida, afirmó, se toma en respuesta a la decisión de Teherán de empezar obras de enriquecimiento de uranio en esta planta.
"A nuestro juicio, Rusia no se retirará a causa de que EEUU no prorrogue la exención de sanciones", dijo Kamalvandi citado por la agencia ISNA.
Rusia decidió suspender el proyecto de reconversión iniciado en la planta de Fordo por haber comenzado el enriquecimiento de uranio en esa instalación, informó antes la empresa TVEL, que forma parte de la corporación rusa de energía nuclear Rosatom.
Sin embargo, el 6 de noviembre, Irán, en el marco de la cuarta etapa del recorte de sus compromisos nucleares con el PAIC, comenzó el enriquecimiento de uranio en la misma sala de Fordo donde se producían los isótopos estables, lo que hizo tecnológicamente imposible la ejecución del proyecto por la empresa TVEL.
El director general adjunto de la corporación rusa Rosatom, Nikolái Spaski, anunció el 6 de diciembre que el trabajo en la planta de Fordo se reanudará en cuanto se solucionen los problemas técnicos.
En mayo de 2018, Washington rompió el pacto y activó varias baterías de sanciones contra Irán con el argumento de que ese país seguía desarrollando armas nucleares.
Un año después de la retirada de EEUU, Irán comenzó a recortar gradualmente el cumplimiento de sus compromisos nucleares ante la falta de avance por parte del resto de países signatarios para contrarrestar las restricciones norteamericanas.