Morales, desde México, aseguró que está dispuesto a volver para pacificar a Bolivia. El exmandatario ha denunciado que el golpe de Estado en su contra fue orquestado desde Estados Unidos y que los golpistas no cumplieron con la Constitución al nombrar a Jeanine Áñez como presidenta interina.
Mientras, en Colombia, el Gobierno está preocupado por el gran paro nacional que se avecina el 21 de noviembre, convocado por diferentes sectores laborales, sociales y políticos del país. Ante esto, el Gobierno busca la manera de desacreditar la protesta social.
Uno de los sectores que a través de los años ha reclamado mejoras es el de la educación. El paro también se dará por temas como la reforma laboral y de pensiones, por el presupuesto de las universidades, la privatización de las empresas estatales y los asesinatos a líderes sociales e indígenas, entre otros.
Durante su primer viaje oficial a la excolonia española, el monarca destacó los vínculos comerciales de su país con la isla caribeña.
Felipe VI también defendió los derechos humanos y la democracia en Cuba y subrayó que es el propio pueblo cubano el que debe decidir sobre su futuro, porque los cambios en un país no pueden ser impuestos.
En otro orden, en Nicaragua, durante la quinta Asamblea Nacional de Sindicatos de Trabajadores Sandinistas, los movimientos afines al Gobierno del presidente Daniel Ortega se declararon dispuestos a movilizarse en todo el país con el objetivo de defender la estabilidad de la nación.
Los seguidores de Ortega señalaron como logros los 40 programas sociales que ha ejecutado el Gobierno de Nicaragua, los que estarían en riesgo si la oposición llegase a asumir el poder.
Estos temas en esta edición del programa '500 millones'.