El Parlamento del Mercosur (Parlasur) emitió en una sesión celebrada este lunes 11 en la capital uruguaya Montevideo una declaración para rechazar el "golpe cívico militar" en Bolivia.
La renuncia de Morales fue luego de que las Fuerzas Armadas le solicitaran dar un paso al costado después de que un informe de la Organización de los Estados Americanos (OEA) mostrara irregularidades en las elecciones presidenciales del 20 de octubre.
"Morales renuncia ante la eventualidad de que si se mantenía en el mando podía ocurrir un gran derramamiento de sangre y grandes convulsiones, que ya se están llevando a cabo", dijo a En Órbita el diputado uruguayo en el Parlasur, Roberto Chiazzaro.
Sobre la crisis en Bolivia, En Órbita también dialogó con el excanciller argentino, Jorge Taiana (2005-2010), con el diputado boliviano del Parlasur e integrante del Movimiento Al Socialismo (MAS), Edgard Mejía, y con el periodista Marco Teruggi, presente en el país suramericano.
Asimismo, el Parlasur "declara su desconocimiento a cualquier régimen surgido del golpe de Estado".
"Este golpe no se da como consecuencia de una observación al resultado electoral. Evo había hecho un acuerdo vinculante con la OEA. No bien terminó de leerse el informe que censuraba el sistema del escrutinio, Evo dijo que llamaba a nuevas elecciones", explicó el diputado.
Chiazzaro destacó particularidades del proceso que llevó a Morales, en el poder desde 2006, a presentar renuncia.
"El tema electoral no era el motivo: lo que ocasiona el golpe es similar a la intentona en Santa Cruz de La Sierra en 2008. Lo que aquí sucede es que el Gobierno de Morales afectó los intereses de la oligarquía boliviana, y el Estado tenía una presencia reguladora y actuaba seriamente", apuntó Chiazzaro.
El Mercosur (Mercado Común del Sur) está integrado por Argentina, Uruguay, Paraguay, Brasil y Venezuela (actualmente suspendido).
España: Socialistas vuelven a negociar para formar Gobierno
El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) venció en las elecciones del domingo 10 de noviembre con el 28% de los votos, pero obtuvo 120 escaños en el
Congreso y quedó lejos de los 176 para gobernar en mayoría.
El Partido Popular se ubicó segundo, con 20,8% de las preferencias y 88 asientos.
Estas fueron las cuartas elecciones en los últimos cuatro años, y las segundas tras el fracaso del presidente en funciones, el socialista Pedro Sánchez, en formar Gobierno luego de su triunfo el pasado abril.
Los resultados de los nuevos comicios revelaron dos grandes novedades: el éxito de Vox y la debacle de Ciudadanos.
Albert Rivera, renunció tras caer hasta menos de 7% de los votos y perder 47 escaños para quedar solo con 10.
El Partido Popular, Vox y Ciudadanos, en una supuesta alianza, no alcanzan la mayoría de Gobierno, en 176 de 350 escaños posibles.
En cambio, para ser investido presidente, Sánchez deberá negociar no solo con la coalición izquierdista Unidas Podemos (35 escaños), como lo intentó sin éxito tras los resultados de abril, sino también con el Partido Nacionalista Vasco y con otras pequeñas formaciones regionales.
Otra posibilidad es que negocie con el Partido Popular, lo que evitaría otras elecciones generales en 2020. La primera fuerza política del país y la segunda sumarían 208 escaños, 31 diputados por encima de la mayoría absoluta.
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