La mayor condena recayó sobre el exvicepresidente catalán, Oriol Junqueras, condenado a 13 años de prisión y otros 13 de inhabilitación absoluta por el delito de sedición agravado por otro de malversación. Además de Junqueras, han sido condenados:
- Los exconsejeros Jordi Turull, Raül Romeva y Dolors Bassa, por sedición y malversación a 12 años de prisión.
- Los exconsejeros Josep Rull y Joaquim Forn, absueltos del delito de malversación y condenados a 10 años y medio de cárcel por sedición.
- La expresidenta del Parlament, Carme Forcadell, a 11 años y seis meses de cárcel por un delito de sedición.
- Los líderes de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y de Òmnium Cultural, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, han sido condenados a nueve años de prisión.
Otros tres procesados, los exconsellers Santi Vila, Carles Mundó y Meritxell Borrás, que ya estaban en libertad condicional, fueron absueltos del delito de malversación y no tendrán que cumplir condena.
Masivas protestas
Pocos minutos después de que el Tribunal Supremo hiciera público el fallo, cientos de personas realizaron cortes de carretera en distintos puntos de Barcelona y se reunieron frente a edificios gubernamentales.
Una de las mayores concentraciones tuvo lugar en la Plaza Cívica de la Universidad Autónoma de Barcelona, donde los estudiantes vaciaron las aulas para sumarse a la protesta. Además, cientos de personas realizaron cortes de carretera en distintos puntos de la capital catalana.
Pero el punto de máxima tensión tuvo lugar frente a la Jefatura de la Policía Nacional y el Aeropuerto de El Prat, donde los Mossos d'Esquadra (la policía autonómica catalana) cargaron contra los manifestantes para disolver las protestas que obstruían el paso, según recogen los reporteros de Sputnik en el lugar.
"Nadie está por encima de la ley"
En una declaración divulgada tras la sentencia del Tribunal Supremo, el presidente en funciones del Gobierno, Pedro Sánchez, afirmó que el proyecto independentista en Cataluña "ha fracasado".
El proceso judicial tuvo lugar "con plenas garantías y absoluta transparencia", afirmó el jefe en funciones del Ejecutivo español. Señaló además que España "es una de las mejores democracias del mundo", que "nadie está por encima de la ley" y que fueron los dirigentes del movimiento independentista catalán quienes ignoraron "los derechos de la mayoría social no independentista de Cataluña".
El mandatario llamó a abrir una "etapa nueva" de convivencia en Cataluña en la que la regla solo sea "la ley y la Constitución española".