Francisco Rodríguez Iglesias, quien es conocido artísticamente como Arévalo, fue invitado por la radio pública valenciana À Punt al programa de Podríem fer-ho millor.
Durante la entrevista, cuando le preguntaron por los límites del humor, el cómico dijo:
"Cuando decían que en la época de Franco perseguían a los gays no era verdad, no han perseguido nunca a ningún gay".
Arévalo aseguraba que conoció al artista Rafael Conde, el Titi, quien "no tuvo ningún problema". Argumentó que "el problema lo tenían los chaperos", y que esto se debía a "la Ley de Vagos y Maleantes que no la puso Franco, sino la República".
La entrevista ha desatado una ola de críticas, al cómico le acusaron de 'blanqueamiento del franquismo' y a los presentadores del programa de no haber intervenido para corregirle.
Un activista LGTBI, portavoz de Compromís en Les Corts Valencianes, Fran Ferri, incluso recordó el fusilamiento de Federico García Lorca.
Ferri asegura que Arévalo no mencionó que dicha ley fue modificada en 1954, durante el franquismo, para incluir y añadir penas a los "homosexuales, rufianes y proxenetas", así como a "mendigos profesionales".
El día siguiente el presentador del programa pidió disculpas por no haber intervenido:
"Arévalo dio una serie de opiniones que no compartimos. Sabemos de la represión, las persecuciones y la falta de libertades durante el franquismo y desde aquí lo condenamos, y lamentamos si alguna persona se ha sentido ofendida".