"En principio, el reparto que hicimos incluyendo a Rumanía, era que vendrían 15 a España. Suponemos que ese será el reparto que se va a mantener", explicó la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, en declaraciones a los medios este 22 de agosto.
Según Calvo, las 15 personas que viajarán a España vendrán en el buque de la Armada Audaz, desplegado por el Gobierno español desde la base de Rota, cuando todavía la situación era "extrema" porque el barco de la ONG no tenía permiso para atracar en ningún puerto de Italia o Malta, los países más cercanos.
"Cuando el fiscal italiano ordenó el desembarco inmediato de los migrantes en Lampedusa, el buque Audaz ya estaba en camino, por lo que ya es más útil y eficiente que termine su ruta y traiga el cupo que nos corresponde a España", afirmó la mandataria española.
La vicepresidenta recordó que España es "un país que respeta los derechos humanos dentro de sus fronteras pero también a quienes vienen desde fuera".
Los dos países europeos más cercanos a las zonas de rescate —y por tanto a los que les correspondería la responsabilidad de atender a los rescatados— eran Italia y Malta, que actualmente tienen una política de tolerancia cero hacia las ONG dedicadas a rescatar migrantes en el mar y no ofrecieron sus puertos.
El barco permaneció 19 días en el mar sin ningún puerto en el que poder atracar, por lo que la situación se convirtió "en una pesadilla", según afirmó el fundador de la ONG, Óscar Camps.