La familia de linces del zoo de Moscú gana nuevos miembros

Los pequeños felinos todavía no han cumplido dos meses y, por ahora, pasan todo el tiempo al lado de su mamá.

La madre aún no permite que se acerquen extraños a sus bebés y los mueve constantemente de un lugar a otro. En la naturaleza, este comportamiento sirve para confundir a posibles depredadores.

Los empleados del zoológico moscovita trabajaron durante varios años para hacer que Gaika y Chip se acercaran y procrearan. Durante mucho tiempo los animales no se toleraron y fue necesario mantenerlos en jaulas separadas.

En 2017, sin embargo, los esfuerzos de los veterinarios finalmente dieron resultados y la pareja de linces tuvo sus primeras crías.

Los otros miembros de la familia de linces demuestran gran interés en los bebés, pero en las primeras semanas, la madre les protegía de todos. Ahora que ya han crecido un poco, la mamá deja que los hijos mayores se acerquen a los pequeños.

Aunque los linces boreales no están amenazados de extinción a nivel mundial, han desaparecido de numerosas zonas, entre otras cosas, debido a la caza excesiva.

Chip, el papá, también se encarga de proteger a sus hijos, al patrullar la jaula y protegerla de intrusos.

Esta es la tercera vez que Gaika y Chip tienen hijos.

La gran familia de linces es motivo de orgullo para los veterinarios del zoo de Moscú, ya que puede ser considerada, en cierta medida, única.

En la naturaleza, estos animales suelen vivir solos y no en grandes grupos estrechos, como el del zoo moscovita.

Los hijos mayores de Gaika y Chip, las hembras Businka y Tikovka y los machos Zigfried y Tristán pronto podrán participar en la crianza de los gatitos. Estas habilidades les serán útiles en el futuro, cuando vivan en otros zoológicos y tengan sus propios hijos.

En los cerca de tres primeros meses, los pequeños linces se alimentarán solamente de leche materna. Después de este período, a la alimentación de los animales se agregarán gradualmente los alimentos de una dieta adulta.