Se vivían tiempos turbulentos en el país, de mucha polarización en torno al plebiscito entre el gobierno y la guerrilla. Esta y otras razones personales llevaron a Luz Ángela a hacer una campaña que transmitiera un mensaje pacificador: Paz mi pez.
Luego llegaron las publicaciones en las redes sociales y los retos como: sonreirle a un desconocido mínimo una vez al día, mirar a los ojos al dar las gracias, o decirle a alguien que lo quieres.
“Las personas empezaron a compartir las frases que empecé a publicar. Esto me hizo entender que estaban hambrientas de paz. A pesar de existir un conflicto por la paz política, la gente estaba buscando respuestas a sus procesos interiores”, expresó Luz Ángela Mastrodoménico, fundadora de la campaña.
Ella está convencida de que la violencia que se ve en las calles, es violencia interna reprimida, por lo tanto, para poder estar en paz con los demás precisamos primero estar en armonía con nosotros mismos.
“En el momento en que le damos a una persona un poco más de nuestra empatía y respeto, empezamos a transformar nuestro universo”, agregó Luz Ángela.
Paz mi pez tiene hoy una comunidad de 700.000 personas en Facebook y 400.000 seguidores en Instagram. Además de camisetas, ofrecen otros productos como placas para la bici, pins, collares para las mascotas y almohadones con mensajes pacificadores.