"Nos vemos en la decisión de comunicar que las VTC tendrán que abandonar la ciudad de Barcelona", dijo en declaraciones a los medios de comunicación María Planas, portavoz de Cabify.
Estas declaraciones llegan después de que varios representantes del sector de las VTC se reunieran con el consejero de Territorio del Gobierno catalán, Damià Calvet, que anunció la voluntad de su Ejecutivo de atender algunas de las peticiones formuladas por el sector del taxi.
Tras la reunión con las VTC, Calvet anunció la presentación de un decreto ley que prohíbe la geolocalización para las plataformas que ofrecen servicios de conductor por vía digital, al entender que su inmediatez se "equipara" con el servicio del taxi.
Del mismo modo, el decreto prohibirá el estacionamiento en la calle de los vehículos VTC, por lo que estas plataformas solo podrán atender a clientes que hayan precontratado sus servicios.
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Los taxistas de Barcelona se reunirán el 23 de enero en asamblea para decidir si mantienen la huelga tras las promesas formuladas por el Gobierno catalán.