El legislador lo dijo al recibir este 15 de enero a la presidenta del Parlamento de Finlandia, Paula Risikko.
"Creemos imposible participar en las labores de la PACE, donde buscan solución de problemas temiendo escuchar unos puntos de vista distintos y organizar la respectiva votación", señaló Volodin.
También indicó que tal actitud pone cruz y raya sobre los principios democráticos del funcionamiento de las estructuras parlamentarias y contradice los fundamentos del parlamentarismo.
Al caracterizar el método que permite privar del derecho a voto a las delegaciones nacionales como un "atavismo de Estados dictatoriales", el político señaló que sería correcto si los parlamentos nacionales expusieran sus puntos de vista al respecto.